Cómo llevar clientes potenciales interesados a su sitio web

Canales digitales hay muchos: Google, Facebook, Instagram, YouTube, email, etc. Y los consumidores usan esos canales en diferentes momentos de su día a día. Sin embargo, al momento de generar demanda, no todos los canales digitales funcionan igual. Hay unos más cercanos al momento de consumo, y otros más alejados. En otras palabras, unos que atraen curiosos y otros que atraen clientes interesados.

Un curioso es aquel que entra a mirar a una tienda, o, en este caso, a un sitio web. No tiene intención de compra y, aunque más adelante puede querer comprar el producto o servicio, por ahora no lo está considerando. Es un visitante que genera tráfico, mira y se va, aunque algunos pocos curiosos pueden llegar a comprar impulsivamente.

El cliente interesado, por su parte, está en el momento de consumo, necesita el producto o servicio que usted ofrece y está activamente buscando información para tomar una decisión de compra. Si encuentra el producto o servicio, con alta probabilidad lo comprará.

Sus clientes interesados están en los buscadores como Google. Como necesita el producto o servicio, está activamente buscando información: está en algún buscador (p.e. Google, Bing) encontrando esa información. De hecho, según cifras de Google en Colombia, 9 de cada 10 usuarios de internet se interesaron en un producto por primera vez en Internet. Si usted vende a empresas, consulte estas cifras sobre el comportamiento de los compradores empresariales en Internet (Artículo relacionado: Marketing B2B: del mundo offline al digital).

Piense en lo siguiente, cuando usted necesita algo que no sabe dónde encontrar ¿qué hace? Seguramente va a Google a buscar y si lo encuentra, puede comprarlo, solicitar más información, saber dónde lo venden para averiguar más, etc.. Recuerde esto: El que necesita busca, el que busca encuentra, y el que encuentra compra.

Cuando trabajé como Gerente de Marketing en Google, tuve la oportunidad de dar conferencias sobre marketing digital a empresarios en diferentes países. Frecuentemente tenía esta conversación con ellos:

• Yo: ¿Encuentra su negocio en Google? 
  
• Empresario: Si - contestaba la mayoría - Busco el nombre de mi empresa y aparezco de primero. 
  
• Yo: Genial. ¿Se encuentra cuando buscan el producto o servicio que usted ofrece? 
  
• Empresario: Hhhhmmm. A veces.... 
  
• Yo: Y cuántos de sus clientes potenciales, que no saben que su empresa se llama como se llama, los buscan por su nombre para encontrarlos de primero? 
  
• Empresario: Hhhhmmm…. ¿ninguno? 
  
• Yo: Es cierto, si el cliente potencial no sabe que ustedes existen, que pasa en muchos casos, cómo los van a encontrar por su nombre? 
  
• Empresario: ...
  

Aparecer de primero cuando alguien busca su nombre, aunque importante, no genera demanda, a menos que su marca sea muy conocida. Pero esta no es la realidad de la gran mayoría de negocios.

Lo que es muy importante, es aparecer cuando un cliente potencial busca los productos o servicios que usted ofrece, o el problema que usted resuelve, y aparecer en las primeras posiciones. ¿Por qué las primeras posiciones? Por que la mayoría de usuarios no pasan de la primera página del buscador de Google. En Internet hay un meme que hace referencia a esto. ¿Cuál es el mejor lugar para esconder un cadáver? La segunda página de resultados de Google.

Entonces, es necesario que su negocio, a través de su página web, aparezca en la primera página del buscador de Google. ¿Cómo lograrlo? Hay dos caminos:

• Publicidad en el buscador de Google 
• Optimización para motores de búsqueda (o SEO - Search Engine Optimization).
  

La publicidad en el buscador de Google corresponde a colocar anuncios de su negocio en respuesta a las búsquedas que realiza un usuario en Google. Normalmente son los primeros resultados que muestra Google y los identifica con un pequeño rótulo de “anuncio”.

Para estar ahí, en su nivel más básico, es necesario pagarle a Google, definir los términos de búsqueda en los que quiere aparecer, crear los anuncios y llevarlos a su página web. Sin embargo, hacerlo bien tiene mucha más profundidad que estas acciones que acabamos de mencionar.

Hacerlo bien supone trabajar simultáneamente en tres aspectos de este tipo de publicidad y lleva a que su inversión sea cada vez más rentable. Las tres acciones requeridas son:

• Mejorar la orientación de sus anuncios (a quienes se muestran) 
• Mejorar sus anuncios (qué comunican) 
• Mejorar su página de destino (a donde llegan los interesados luego de hacer clic).

La optimización para motores de búsqueda (o search engine optimization), por su parte, busca que su sitio web aparezca en las primeras posiciones de los resultados no pagos. Es decir, en los resultados que se encuentran debajo de los anuncios. No son publicidad paga y no se paga por cada clic recibido.

En su nivel más básico, optimizar un sitio web para los buscadores significa trabajar tres aspectos:

• Escoger las palabras claves relevantes para su negocio teniendo en cuenta sus productos y servicios y el nivel de competencia de su categoría.
• Mejorar la implementación técnica de su sitio web para que el buscador interprete adecuadamente su página y comprenda cuándo es relevante para las búsquedas de un usuario, y 
• Generar vínculos entrantes que apunten a su sitio web y den votos de confianza a su página.

Sin embargo, el SEO tiene un componente altamente técnico y requiere de un trabajo consistente durante un periodo considerable de tiempo. Es una estrategia muy costo efectiva para generar clientes interesados, pero que toma tiempo: subir posiciones en el ranking de Google no sucede de la noche a la mañana.

En Resultero Agencia Digital le ayudamos a llevar clientes potenciales interesados a su sitio web potenciando los canales digitales adecuados. Conozcámonos, cuéntenos sobre su negocio y le ayudaremos a crecer rentablemente.